No se activa por ruido, sino por la vibración de las cuerdas vocales. Cuando el perro ladra, aulla o gruñe, el collar le proporciona el impulso prefijado manualmente por el propietario. En contra de lo que pueda parecer a primera vista, los collares electroestáticos no castigan, disuaden e impiden el ladrido. El perro no ladra; no hay ladridos y por tanto, no hay nada que corregir.
• Collar sumergible, con tecnología avanzada y gran calidad de fabricación.
• Captador de vibración ajustable, para adaptarse mejor a ladridos y aullidos de diferente intensidad.
• 5 modos de corrección manuales o automáticos.
• Correa ajustable de 17 a 50 cm.
• Ideal para todas las razas y tamaños.
• Funciona con una pila de litio de 3v (CR2). Duración de la pila (incluida): aproximadamente 6 meses.
• Medidas: 3,9x4x7,2 cm (anchura x altura x longitud). Peso: 65 g.
• 3 años de garantía.